El Congreso apoya la devolución del archivo con la única oposición del PP

j.l. lorente/

MADRID. El proyecto de ley de restitución a Cataluña de los documentos depositados en el Archivo de Salamanca comenzó ayer su andadura parlamentaria. El PP no encontró apoyo en el resto de grupos -que expresaron su respaldo al texto del Gobierno- y el Congreso rechazó por amplia mayoría -187 votos frente a 135- la enmienda de devolución al Ejecutivo que había presentado el primer partido de la oposición.

En el debate previo a la votación, la ministra de Cultura, Carmen Calvo, se remontó a explicar los antecedentes del contencioso y aseguró que el proyecto de ley persigue el doble objetivo de acabar con la «injusticia» que cometió el franquismo con la Generalitat, al «expoliarle» unos documentos, y de salvaguardar la integridad del Archivo de la Guerra Civil. Además, quiso dejar claro que el proyecto va en la misma línea de reparar daños ocasionados por la dictadura que persiguieron otras leyes famosas de la Transición, como la de amnistía de presos políticos o de derechos sindicales.

Respecto a la enmienda del PP, la ministra sostuvo que tanto el procedimiento de aprobación del proyecto, como su remisión a las Cortes, «ha seguido escrupulosamente lo dispuesto en la ley de Gobierno y cuenta con los trámites preceptivos que exige». Negó así que el trámite sea defectuoso por falta de los informes de la Junta Superior de Archivos. La falta de esos documentos fue uno de los motivos que esgrimió el diputado popular Gonzalo Robles para rechazar la iniciativa del Gobierno, que atribuyó a las «urgencias» de sus socios parlamentarios «que han presionado» al Ejecutivo socialista. Robles también acusó al Gobierno de «despreciar y engañar» a los «miles de ciudadanos» que apuestan por la unidad del Archivo, como se demostró en la reciente manifestación de Salamanca. La anécdota del debate la protagonizaron los diputados catalanes del PP Alicia Sánchez Camacho y Jorge Moragas, que se abstuvieron durante la votación. Estos diputados hicieron pública una nota en que la sostienen que no rompieron la disciplina de voto de su grupo y que su postura se debió a una «equivocación».
 

*Fuente : abc.es, 24 de junio de 2005