anagrama
cerrar boton_cerrar

El Consejo de Ministros eleva al generalato al hijo del líder ultraderechista en la transición.

EL PAÍS | España
M
IGUEL GONZÁLEZ 
Madrid, 17 de enero de 2004

El Consejo de Ministros ascendió ayer a general de brigada del Ejército de Tierra al coronel Blas Piñar Gutiérrez, quien en 1981 fue arrestado y expedientado judicialmente como firmante del llamado Manifiesto de los 100, que contenía duras acusaciones a la prensa y manifestaciones de simpatía hacia los golpistas del 23-F. En septiembre de 2002, Blas Piñar recibió al Príncipe en Bosnia-Herzegovina como jefe de la Agrupación Española SPAGT XVIII.

El ascenso al generalato de Blas Piñar, hijo del notario del mismo nombre que dirigió el partido de extrema derecha Fuerza Nueva durante la transición, es un símbolo de la integración en el régimen democrático de muchos militares que mantuvieron posiciones ultras en su juventud.

En diciembre de 1981, el entonces capitán sufrió un arresto de dos meses como firmante del Manifiesto de los 100, un intento de utilizar a las Fuerzas Armadas para presionar al Gobierno de Leopoldo Calvo Sotelo. Aunque un centenar de mandos suscribieron el escrito difundido por Europa Press, sólo ocho -entre ellos, Blas Piñar- fueron expedientados, por considerarlos promotores de un acto colectivo de indisciplina. En diciembre de 1985, la Audiencia Nacional ordenó que se les repusiera en sus destinos, de los que habían sido separados con carácter forzoso.

Por otro lado, el pasado día 13 fue nombrado jefe del Estado Mayor Conjunto, uno de los puestos de mayor relevancia operativa en las Fuerzas Armadas, el teniente general del Ejército de Tierra Joaquín Tamarit Navas. El 23 de febrero de 1981, el entonces capitán estaba destinado en el Estado Mayor de la División Acorazada Brunete. Por indicación del comandante Ricardo Pardo Zancada, Tamarit se encargó de trasladar al teniente coronel José Ignacio San Martín el mensaje en clave "la bandeja está grabada"; que significaba que el general Torres Rojas había llegado al cuartel general de la Brunete para tratar de sumarla a la intentona golpista. Tamarit rechazó la invitación de Pardo Zancada para unirse a la columna que ocupó al Congreso. No fue procesado y declaró como testigo en el Consejo de Guerra de Campamento, en 1982.