anagrama
cerrar boton_cerrar

El Gobierno negocia la ampliación y mejora de las pensiones de los 'niños de la guerra'

La comisión para las víctimas de la Guerra Civil comienza a trabajar con cinco millones

CARLOS E. CUÉ

Una de las reclamaciones principales de los socios del PSOE, ERC e Izquierda Verde, es la recuperación de la memoria histórica y la reparación, también económica, a las víctimas de la Guerra Civil y de la represión franquista. El PSOE lidera la iniciativa y ha incluido en el Presupuesto una partida de cinco millones de euros para que la Comisión Interministerial que dirige la vicepresidenta, María Teresa Fernández de la Vega, comience su trabajo. Ese dinero servirá también para reabrir fosas, el trabajo más complejo. Las pensiones para los más de 600 niños de la guerra se negocian estos días.

El Gobierno tiene ya sobre la mesa las reclamaciones de las asociaciones que representan a los niños de la guerra. Se les llamó la generación perdida . Nadie sabe con precisión cuántos fueron, aunque la mayoría de los historiadores calcula que unos 30.000 hijos de republicanos españoles abandonaron de forma organizada el país durante la Guerra Civil. Iban camino de tierras libres de la contienda, aunque muchos se encontraron poco después con la II Guerra Mundial.

El franquismo se empeñó en repatriarlos. En 1949 había recuperado "para reeducarlos", según su habitual retórica, a unos 22.000. Faltaban los de la Unión Soviética y México, países que se negaron a reconocer el régimen fascista. La mayoría ha fallecido ya, pero según la Asociación Guerra y Exilio (AGE), que se ha puesto en contacto con el grupo de Izquierda Verde, sólo de los niños rusos quedan más de 600 personas. De ellos, unos 400 están en España. Quienes vivieron en Rusia o Ucrania tienen derecho a una pensión no contributiva, porque España tiene convenio con la Seguridad Social de esos países. Pero los que llegaron tras la democracia desde Azerbayán , Georgia, Moldavia u otros países sin convenio, sólo pueden acceder a una pensión por ancianidad que se queda en 72 euros mensuales si conviven con otro familiar que tenga algún ingreso. Según la asociación, muchos de ellos, a pesar de superar los 70 años, se ven obligados a buscar trabajo para llegar a fin de mes.

Para todos ellos, el Gobierno y sus socios están negociando una partida, aún no cuantificada, destinada a que todos tengan una pensión asistencial. La Asociación Guerra y Exilio reclama una cantidad mensual equiparable al salario mínimo (490 euros) y una compensación económica como víctimas de la guerra que se cobraría una sola vez.

También está pendiente de negociación la situación de los niños de la guerra que decidieron quedarse en la antigua Unión Soviética o en otros países. La AGE tiene localizados a 228 en Rusia. 134 están vinculados al Centro Español de Moscú, otros 40 están en la provincia que rodea a la capital y otros 54 desperdigados por todo el país. Para ellos, como trabajadores durante todos estos años, se pide una pensión contributiva completa. Por último están los guerrilleros, que lucharon contra el franquismo en las montañas una vez acabada la guerra.Ya quedan muy pocos vivos, y padecen graves problemas de salud, debido a la vida difícil que llevaron en la clandestinidad y a las torturas que sufrieron cuando fueron capturados. Para ellos se pide una compensación única de 93.000 euros. Algunas comunidades gobernadas por la izquierda ya han establecido pequeñas pensiones para este colectivo, pero nunca se ha hecho nada a nivel estatal.

Lo único que de momento está cuantificado son los cinco millones para la recuperación de la memoria histórica. Los grupos que se ocupan de la reapertura de fosas, especialmente la Asociación por la Recuperación de la Memoria Histórica, independiente, y el Foro por la Memoria, vinculado al PCE, esperan esas ayudas para un trabajo descomunal (más de 30.000 desaparecidos) que hasta ahora han llevado adelante sin subvenciones.

*Fuente : El País, Madrid. 1 de Noviembre de 2004